Jason Alexander, quien se encuentra detenido desde el 9 de junio cuando irrumpió en la boda de la princesa del pop, participó de una audiencia previa al juicio en su contra. Si es condenado, podría enfrentar la pena de cinco años de prisión.
Noticia Anterior

Voces argentinas reunidas por Sipemeran recrean el universo estético de Leonard Cohen

Noticia Siguiente

ROBO, RECUPERO Y APREHENSIÓN EN FLAGRANCIA